Leandro Díaz Doroñuk no estuvo a la atura de lo sucedido en el clásico entre Unión y Fuerza- Obreros Unidos.
A pesar de un partido "discreto" el árbitro desaprobó la tarde, omitiendo 5 penales en total (4 de ellos muy claros) que no fueron cobrados.
Amagó con amonestar a varios jugadores y hasta se llevó la mano al bolsillo y luego no mostró tarjetas. Su evaluación en las diferentes jugadas fue muy confusa.
En los últimos tiempos el tema del arbitraje da que hablar en la Liga del Noroeste Chaqueño y en este caso hasta tuvo incidencia en el resultado.
Los registros de la TV demuestran que tuvo una trade para el olvido.