Otra vez Atlético es noticia. Darío Cerrano, quebrado, se fue a hacer atender a una clínica local. Y mientras esto pasaba, alguno/algunos le manotearon el teléfono a la enfermera. La Policía demorando al plantel completo en la ruta y el arquero “cautivo” en el nosocomio hasta que no apareciera el móvil. Vergonzoso.
Darío Cerrano sufrió una fractura de peroné mientras atajaba en Sportivo-Atlético. A las disparadas fue a hacerse observar en el sanatorio oficial con un medico, acompañado de cuerpo técnico y compañeros. Los muchachos, al ver que la situación estaba un poco controlada partieron rumbo al regreso a Charata y a mitad de camino sonó el teléfono de alguno de los dirigentes, llamado en el cual otro integrante de Comision Directiva le comunicaba la vergonzosa novedad: Alguien le robó el teléfono a una de las enfermeras y mientras el mismo no era devuelto ni Cerrano ni su acompañante iban a poder retirarse de la clinica.
Sandra Pedrido hizo la denuncia en la Policía que procedió rápidamente emprendiendo viaje hasta alcanzar en la ruta al colectivo charatense. En el mismo la enfermera a bordo que una vez allí exigió la devolución del teléfono móvil junto al chip y el cargador y dinero en efectivo que también se había perdido.
Según trascendió, luego de varios minutos de discusiones dentro y fuera del colectivo el aparato finalmente apareció en la oscuridad del transporte junto a los accesorios, no así el chip ni el dinero. Fueron demorados dos integrantes del plantel de Reserva y un jugador de Primera División a los que se los trasladó a la Comisaría de Hermoso Campo. Horas mas tarde fueron liberados.
Al otro dia, es decir lunes, personalmente el Presidente del Club Atlético Charata se dirigió a la enfermera Sandra Pedrido para devolver el chip y muy avergonzado, pedir las disculpas correspondientes.
No es la primera vez que Atlético sobresale en este tipo de noticias lamentables que tan malparada dejan a la institución. Hace meses, Gaston Falkievich agredió físicamente al arbitro Hugo Camus, hecho que terminó también en una denuncia policial, un enfrentamiento judicial y el jugador suspendido por tres años.
Dado este vergonzoso suceso policial, Raul Martinez y Yuyi Arevalo, entrenadores de Primera División y Reserva habrían amagado con renunciar. Hoy martes vuelven a los entrenamientos y se espera una reunión tensa entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes.
Fuente: Fútbol Charatense