Debido al velo islámico, el veedor oficial le impidió al seleccionado iraní disputar un encuentro clasificatorio a los Juegos Olímpicos 2012; le dieron el partido por perdido 3 a 0; desconsuelo de las futbolistas
Las chicas tenían un sueño deportivo y buscaban alcanzar, para ellas, la gloria. Las chicas querían clasificarse a los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Las chicas juegan al fútbol y representan a Irán. Pero, una inesperada decisión de la FIFA las puso entre la espada y la pared: para disputar el partido clasificatorio ante Jordania las futbolistas debían quitarse el velo islámico de sus cabezas, pues, según el organismo, infringe las normas de vestuario oficial. Se negaron. El sueño de llegar a los Juegos Olímpicos fue aplastado. Irán protestará oficialmente ante la Federación Internacional de Fútbol (FIFA). "Vamos a poner una denuncia (...) ante la Federación Internacional de Fútbol" declaró el presidente de la federación iraní Ali Kafashian al periódico Arman. El uniforme es de cuerpo entero e incluye un pañuelo en la cabeza. La FIFA le dio a Jordania una victoria 3-0 que podría costarle a Irán el puesto en los Juegos 2012.
La responsable de asuntos femeninos en la federación iraní de fútbol señaló que Irán ha introducido cambios en la vestimenta de sus jugadoras después de que la FIFA lo prohibiera el año pasado, y que creían que había recibido la aprobación de la federación y su presidente, Joseph Blatter. "Hicimos las correcciones necesarias y jugamos un partido después", dijo a Reuters TV Farideh Shojaei en una entrevista. "Jugamos la siguiente ronda y no les impidieron hacerlo, y no encontraron nada incorrecto. Eso suponía que no había obstáculos por nuestra parte, y que podíamos participar en los Juegos", añadió.
La entidad dijo, en tanto, que se le había recordado a los dos equipos las reglas antes del partido del viernes y que, por eso, Jordania había decidido no convocar a varias jugadoras. Las normas olímpicas de la FIFA para 2012 indican que los jugadores y representantes no deben mostrar mensajes políticos, religiosos, comerciales o personales o lemas en ningún idioma o forma sobre sus equipos deportivos. Para cumplir las normas islámicas de vestuario obligatorias en el país, las futbolistas iraníes juegan con chándal largo y con la cabeza cubierta. "En realidad, este uniforme no es ni religioso, ni político, ni hará daño a una jugadora", destacó Shojaei.
La FIFA no hizo comentarios inmediatos sobre el caso.